3° Encuentro de Intercambio de Saberes en el cantón Sigsig

Cuenca, miércoles 10 agosto 2016
(izq.) Bfq. Tatiana Mosquera explicando cómo realizar los productos fitoterápeuticos con la profesora Noemi Bottasso (der.)
(izq.) Bfq. Tatiana Mosquera explicando cómo realizar los productos fitoterápeuticos con la profesora Noemi Bottasso (der.)

 

 

El martes 09 de agosto se realizó en Sigsig el III Encuentro de Intercambio de Saberes dirigido a las personas del Grupo de Medicina Ancestral Fasaiñan del cantón y sus herederos. El evento forma parte del proyecto de investigación "Plantas de la cuenca del Rio Santa Bárbara y elaboración de fito-preparados" de la docente de la Sede Cuenca Noemi Bottasso, quien tuvo el apoyo de Tatiana Mosquera, docente de la Sede Quito, Delfa Iñamagua, coordinadora de medicina ancestral del Ministerio de Salud Pública y el Gobierno Autónomo Descentralizado Municipal del Sigsig.


Con la realización del encuentro se propició un espacio de intercambio entre los saberes ancestrales y el conocimiento científico, logrando alcanzar los objetivos propuestos: generar un ambiente sinérgico entre las diferentes partes, fomentar el asociacionismo, estimular el cambio y desarrollo social, rescatar la sabiduría de los ancestros y fomentar su transmisión a las nuevas generaciones de jóvenes del Sigsig.


Para la realización del trabajo cada participante trajo una planta tradicionalmente utilizada para problemas de cutis y para lavar el pelo, como la sábila, el romero, la altamisa. Después de una breve explicación de las propiedades de cada especie vegetal se empezó, distribuidos por grupos, con la elaboración de jabones y champú a base de la misma materia prima natural. La docente Tatiana Mosquera supo guiar con destreza a los diferentes grupos, explicándoles de manera práctica y sencilla como elaborar los preparados.


Los participantes demostraron mucho interés a lo largo de la actividad, remarcando la importancia de generar espacios de intercambio para el empoderamiento de las nuevas generaciones.


La municipalidad, eufórica por el alto nivel de satisfacción de los participantes, demostró públicamente su abertura a generar un espacio comunitario para la elaboración y venta de preparados fitoterápeuticos.